Una vez que se cortan las flores, se las priva del agua, los alimentos y las hormonas de crecimiento que les proporciona la planta madre en la etapa previa a la cosecha. Para permitir que la flor cortada siga floreciendo de forma natural, mientras conserva su forma, color de flor, aroma y color de hoja, debemos suministrarle alimento para flores en el agua del florero. Esto debe suceder en todas las fases de la cadena de distribución: a nivel de productor, mayorista, florista y minorista y, finalmente, a nivel de consumidor.